viernes, enero 28, 2005

lagrimitas de niña grande

Anoche lloré. Un llanto infantil. Casi quise estar en el regazo de mamá. Me contuve porque recordé que ya soy niña grande y que las niñas grandes sólo lloran por amor, o por los hijos... o por la amargura de partir. Las niñas grandes no lloran por la preocupación de pagar la renta, ni porque el jefe les gritó, ni porque les han pedido que sirvan la cena cuando las espaldas están llenas de cansancio, ni porque les han cortado la luz.
×
Hoy por la mañana soy tan niña grande que me porto mal: no me baño, llego tarde al trabajo, me niego a seguir participando en “el programa” sólo por sacar de quicio al peloncito que me paga. Esperaré cabalmente a que corran las ocho diarias horas de oficina y rayos catódicos del monitor para que una vez, pie en calle, me enfile a uno de esos antros de mala muerte que tanto nos gustan a las niñas grandes para llenarme el estómago y la cabeza con alcohol.
®
Mañana, tendré una de esas crudas de niñas grandes e iré a desayunar a algún lado... a las niñas grandes de hoy no nos gusta cocinar diario.


Comments: Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?