mico-razón y la|doble|yo

No. Imposible ser una que repite la historia de otros. Imagino, porque me gusta imaginar, que si existe historia es una nueva, independiente, jamás pensada ni recreada, que camina sin saber aún si lo hace entre bosque, selva o playa. Que goza con la aparición de neblina, abrigos largos y después se descubre habitando los suelos de Madrid o Francia, castillos encantados, balsas tambaleantes, cielos despejados.

Sin embargo, tolero que la estética esté embarrada de letras. Hasta lo agradezco. Supongo que si no fuera por el lenguaje tu no sabrías que acabo de ver un cielo de junio en diciembre, o que suelo mirar al suelo, o que cuento cuentos... o que me gusta aquello de “nubes de paz cercan el cielo. Amor jamás dejarás de ser amor”.

Espero pero´s porque pero´s soy.

Mis demonios se divierten conmigo. Lo sé porque en medio de la noche consiguen despertarme con sus juegos. Ellos juegan a mí. Suelen esperar a que mi cuerpo esté tendido y relajado para iniciar la batalla. Sólo es cuestión de aletear por encima de mi cama, de empujarme del sueño a la realidad y después dejarme caer en el vacío. Algunas veces sólo necesitan revolotear cerca de mi rostro con sus negruzcas alas olorosas a aceite quemado para sofocarme. Otras, necesitan gritar fuerte a mi oído, reír a carcajadas y atormentarme con descripciones meticulosas de escenas horripilantes imposibles de olvidar al despertar. Esos días, siento que al dar la vuelta a la esquina me topare de frente con la pesadilla y a veces no soy capaz de salir de casa, cierro las ventanas, meto el cuerpo a la cama y me quedo entre las cobijas incapaz de conciliar el sueño.

hace unos dìas platicaba con el cineasta, de todas esas cosas que hicimos en la universidad, sus versiones y las mías... una peli a dos cámaras dije yo... terminé por ver escenas que no había visto, algunas que seguro me perdí cuando me levante al baño o por palomitas... es extraño... se siente extraño encontrar en el pasado los sueños y las esperanzas de gente conocida... recuerdo el recuerdo en el recuerdo de alguien más...

la tercera parte de ésta mi historia me sitúa en medio de la nada. como si esta protagonista que soy tuviera como única pertenencia una enorme caja de sueños que arrastra por las calles de guadalajara. a veces, cuando regresa a casa, siente tanto miedo que duerme o enciende la computadora e inicia tres o cuatro cosas que nunca acaba. otras veces, busca desesperadamente coprotagonistas y se desilusiona al descubrir que ningún actor le convence... es como estar en un eterno casting en busca de gatos al que únicamente se presentan los perros.

a veces me asusto mucho. supongo que siento vergüenza de lo que hago y no hago. sé a ciencia cierta que tanto tiempo sola terminará por volverme dubitativa y monstruosa: una que sabe tantas historias de sí misma que mostrará total desinterés por las ajenas. Lo veo venir y no me muevo del paso. Siento una extraña necesidad de que gane velocidad y me arrolle. Pero al mismo tiempo quiero que ahí, parada, aparezca por un costado de la toma alguien y se arroje contra mi para salvarme. En cualquiera de los dos casos gozaré el fílmico desenlace.

she said: acuerdate de mi. tipica sensacion de haber hablado con el gansito marinela, con todo y su plumaje blanco. y ella dijo que le recordara. y cómo debía hacerlo. entonces, inmediatamente la recordé. y me fui a casa. y supe que pasaría una de esas noches largas donde la madruada está llena de calor. y pensaría en su recuerdo... y habría cumplido su capricho: recordarla.

How to be a fucking star.

Whereve you a you are here... he said.

Y nunca más volvió a decir nada, simplemente desapareció de la faz de la tierra y yo no pude hacer nada. El silencio, dos o tres tardes sentada frente a esa enorme pared de ladrillos naranja pero no más. No se pudo hacer nada con mi corazón que se quedo pequeñito, como sin alimento, el alimento que venia de el. Y la medicina, como cuando sentía gripa y la única posibilidad era una sopa de sus letras.

Después, terminé por aprender que hay despedidas a gritos y otras que se quedan solo en las ganas. Los adioses interrumpidos, los postergados y esta estúpida televisión de domingo que solo tiene comedias románticas.